jueves, 27 de mayo de 2010

HISTORIA DE LA TALAVERA EN PUEBLA

La procedencia y esencia se remontan a la fusión que se dio durante los ocho siglos de dominación de la cultura árabe sobre la española, ha sido empleada desde hace mucho tiempo en México y se ha creado tanto con fines prácticos como decorativos।
Para algunos estudiosos el nombre de ¨Talavera¨ para referirse a la cerámica poblana, se dio en honor a los alfareros provenientes de Talavera de la Reina, España, quienes introdujeron la técnica de esa cerámica en Puebla.
Otra de las teorías es la desarrollada por los autores que afirman que los frailes dominicos establecidos en la ciudad poblana, al conocer las aptitudes alfareras de los indígenas y deseosos de obtener azulejos para su convento, mandaron traer hermanos que supieran el arte de la cerámica y así les enseñasen a los indígenas. Sin embargo, una de las más sencillas, coherentes y creíbles teorías es la que sostienen la mayoría de los especialistas, la cual dice que a la loza de Puebla se le designa con el término de Talavera por ser una copia fiel de la producida en la mencionada población española. A pesar del tiempo transcurrido desde la colonia hasta la época actual, la forma de realizar la artesanía no ha variado ni ha sufrido muchas modificaciones.
El proceso va desde la utilización de los dos tipos de barros que debían ser colocados en el suelo y el ceramista caminaba encima con el propósito de obtener una masa uniforme y de buena consistencia. Una vez que el barro obtenía su forma deseada, se dejaba en habitaciones sin ventilación por una larga temporada para que el secado fuese uniforme y después de un tiempo razonable, las piezas se sometían a una primera cocción en horno de leña. El barniz hacía su función después de secarse para decorar los objetos con diferentes diseños. De una serie de colores y formas diversas establecidas en las Ordenanzas y que variaría dependiendo de la calidad de las lozas.
El alfarero de la época colonial sabía que durante la última operación, que consistía en una segunda cocción que duraba hasta cuarenta horas, podía perder un número cuantioso de objetos, por lo que siempre hacía una plegaria a Dios al momento de dar inicio con el penúltimo de los pasos para concretar su obra artesanal. La Talavera representa una artesanía de incalculable valor, ya que es creada con un gran esfuerzo y dedicación por hombres que consagran sus vidas a ella.

En la epoca actual la talavera poblana esta libre de plomo lo que la hace de mayor calidad, hecha a mano al 100% y reconocida mundialmente.